martes, 14 de junio de 2011

14.- Lobos confusos

Poco a poco, nos fuimos despertando. Mire a mi alrededor y vi a mis compañeros, algunos aun inconscientes en el suelo, y otros levantandose, confusos acerca de lo que nos había pasado. Recordaba vagamente, Cristalice herida gravemente, estábamos a punto de acabar con su insignificante existencia, cuando algo me golpeo y ya lo demás era oscuridad. Que confusión, la cabeza me dolía horrores, cosa que me extraño. Aquel extraño sujeto si que era fuerte, casi nadie en mucho tiempo había conseguido hacerme sentir un dolor de ese tipo.

"¿Estais todos bien?" Un cántico de quejidos fue lo más cercano a una respuesta que obtuve. 

Era increíble. Aquella eriza no había podido ir muy lejos en su estado. Si es que aun seguía viva. Aunque por la forma de su desaparición, habíamos sido atacados por sorpresa, y ese mismo ser, se la había llevado. Tras recuperarnos un poco, convoque una reunión para que todos pusiéramos en común lo que recordásemos.

"¡Unas sombras extrañas, recorrieron la oscuridad y me atacaron!"  

"Noté unas extrañas presencias en aquel instante. Había mucha energía oscura. Muy poderosa...¿También lo notasteis, no?"

"Si, yo también lo note. Pero estaba demasiado ocupado en poder tener la oportunidad de desgarrar algo a la vampira"

"Fuera lo que fuera lo que nos atacó, se ha ido, y se ha llevado consigo a la vampira"

"¿Habrán sido los de su clan?"

"No. Ni su líder desprende dicha aura. No, aquella aura parecía salir de las más profundidades del infierno"

"Bueno, ¡basta ya!" Toda mi manada cayó y los murmullo cesaron "Bien, de momento lo que tenemos es: todos bajamos la guardia ante la idea de tener una presa; fuimos atacados por unas extrañas y, al parecer, poderosas sombras; nuestro o nuestras personas no son del clan de Kara. Bien, ahora razonemos. Aparte de nosotros y Kara...¿Quién y para qué iban a querer a Cristalice?" A la vez que hablaba, paseaba la mirada posándola durante breves instantes en cada uno

"Creo saber quienes pueden ser a los que buscamos..." Mephiles apareció desde las sombras. Era curioso, pero a él no recordaba haberlo visto inconsciente o recomponiendose en el suelo. Por lo que lo miré intentando mantener el rostro serio e inexpresivo y la mirada penetrante "Hace un tiempo..." Comenzó a juguetear con una navaja que tenía siempre, poniendo en la punta la llema de su dedo índice, y empezó a caminar a la vez que miraba a su daga "Antes de que nuestro querido jefe, se obsesionara con atrapar al clan de Kara..." Sentí como una extraña punzada en el corazón, y el rostro de la eriza apareció en mi mente. Pero me mantuve pro mantener la mente en blanco y la sangre fría. "Tuve un encuentro con un vampiro, que reunía todas las características que todos parecemos recordar. Control de las sombras del mismísimo infierno..." Paseaba entre nosotros, como jugando y susurrando en voz alta a cada uno, de manera que todos lo oyesen. Su voz era picara y tenebrosa, como siempre " Una flamante aura oscura, que hacía que en mis tiempos jóvenes sintiera envidia hacia esa criatura..." Tras pasearse entre nosotros volvió cerca del árbol del cual había aparecido y con su cara fingió una mueca de tristeza "He de admitir que consiguió herirme... Sus sombras eran muy fuertes y rápidas. -suspiro- Lo último que me pareció oír de él es que junto su propio clan, o que murió, aunque los recientes hechos me demuestran que eso es falso"

"¿Y sabes donde podríamos hallarlo?" Mephiles vaciló, lo que hizo que mi mosqueo aumentase. Aquel erizo podía ser tanto una persona callada, fría y siniestra, a una persona como en aquellos instantes. Capaz de hacerme perder los papeles. Calma y sangre fría Me repetía cuando me entraban ganas de perder los estribos

"Mmm"

"Mephiles dinos su nombre" Ordené clavando la mirada en sus ojos, que ni se inmutaron

"Mmm, no sé. Además, ¿qué gano yo diciéndolo? ¿Es qué acaso crees, que teniendo a la eriza, conseguirás a Kara?" Apreté los puños. "A, si aun lo recuerdo. Creo que se llamaba, Xiro..." Retrocedió y desapareció en las sombras nuevamente

"Bien. ¡Ashura!"

"¿Si, jefe?"

"Encuentra toda la información posible hacía cualquier persona de nombre Xiro, desaparecido o viviente por la zona"

"Si, jefe" Dijo agachando la cabeza y saliendo a realizar su misión

"Los demás, rastrear la zona, y buscar pistas o algún rastro" Todos se giraron dispuestos a irse cuando coloque mi mano en el hombro de Ángel "Tú y yo tenemos una charla pendiente" Solo se limito a asentir. Cuando estuvimos solos, nos transformamos y llegamos a una zona de Red Montain. Si Mephiles andaba por allí, cuanto más lejos estuviésemos mejor. Cuando miré a Ángel estaba inquieto, y miraba aquel paseo inquieto y asustado.

"¿Por qué andabas con ella Ángel?" El joven bajo la mirada al suelo y tardó un tiempo hasta que se atrevió a responder mi pregunta

"Caminaba hacía la escuela y nos juntamos por el camino..."

"No te pregunte hacía donde te dirigías o cuál fue la razón. Mi pregunta fue ¿por qué estabas con ella?" Repetí la pregunta casi con un atisbo de grito y enfado

"Yo...yo...No lo sé..."

"¿No lo sabes? ¿O no me lo quieres decir?" Ángel me miro sin entender por un instante.

"..."

"¡Responde Ángel!" Sus puños se apretaron

"Porque yo... yo...¡porque quería estar con ella!" Estuve a punto de reírme, pero al sostenerle la mirada, vi que estaba confuso, enfadado, triste. Una ola de sentimientos melancólicos reinaba en sus ojos "¡Ponte en mi piel por una vez, Shadow! Imaginate solo, que  un día de ciclo matas con tus propias manos a la persona que amas!" No se la razón, pero la imagen de Kara vino a mi mente al oír aquello" ¡Para después, enterarte de qué es un vampiro! Imaginate, todos los días, todas las noches, viendo a esa persona especial. Vuestros recuerdos felices y después, la magia se destruye cuando la ves, ¡tendida en el suelo, con extremidades del cuerpo arrancadas y cubierta de sangre y lágrimas! ¡¿ Y crees qué porque sea una jodida vampira voy a matarla, otra vez?!" Por primera vez me quedé dudando de que decir, me sentí paralizado ante la idea de soportar aquello

"Entonces...¿por qué...?"

"¿Por qué ofrecí a Sonic a cambio de su vida? Sencillo. Hace unos años, cuando perdimos el rastro del clan vampiro y encontramos la casa destruida...Bien, aquel día me aleje demasiado intentando buscar algo, cuando en mi mente vi como un destello y lo seguí. Y lo que encontré fue a ella, sobre una enorme roca con los ojos cerrados. Me quedé allí admirándola de cerca, cuando apareció Sonic. Ella se desahogo con él acerca de lo que yo la hice. Sentía que se me caía el alma al verla llorar, y que aumentaba mi ira verla en brazos de otro. Y para colmó, lo besó en la mejilla. Tiempo después me enteré que tubieron una especie de relación. Y pensé en matar a Sonic. Por eso ofrecí la vida de Sonic, a cambió de tener a Cris a mi lado..."

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